P: Mi hijo tiene problemas para dormir. ¿Cuáles son las causas comunes del insomnio en niños pequeños?
- Myeongchan Kim
- 29 nov
- 2 Min. de lectura
Esta publicación es una dramatización de una sesión de preguntas y respuestas que vivió uno de nuestros revisores médicos. Tenga en cuenta que este contenido es solo para fines informativos y no constituye asesoramiento médico. Consulte siempre a un profesional de la salud calificado para cualquier problema de salud o antes de tomar cualquier decisión relacionada con su salud o tratamiento. La revisión médica se basó en la versión en inglés de esta publicación.
Pregunta: Mi hijo pequeño tiene problemas para conciliar el sueño y para permanecer dormido. Algunas noches son una verdadera lucha y es agotador para todos. ¿Cuáles son las causas comunes del insomnio en niños pequeños?
Respuesta:
Comprendo perfectamente lo estresante que puede ser cuando su hijo pequeño no duerme bien. En mi experiencia, uno de los mayores desafíos es tener una rutina o un entorno inconsistente. Los niños pequeños se desarrollan mejor con la previsibilidad, por lo que si la hora de acostarse varía cada noche, o si hay muchas distracciones en su habitación, puede ser difícil para ellos relajarse. Demasiado tiempo frente a las pantallas cerca de la hora de dormir también tiende a sobreestimular a los niños pequeños, lo que les dificulta conciliar el sueño.
Otra causa común que he visto es la ansiedad por separación o el estrés. Los niños pequeños pueden sentirse nerviosos por estar solos por la noche, o podrían estar preocupados por cambios en su vida diaria, como empezar a ir a la guardería. Incluso las pequeñas ansiedades pueden provocar grandes emociones a la hora de acostarse, y es importante abordar estos sentimientos con consuelo y constancia.
También es útil verificar si existe alguna fuente de malestar físico. El dolor de la dentición, un dolor de oído o una nariz congestionada pueden interrumpir realmente el sueño. Algunas condiciones médicas como el reflujo o el eccema también pueden influir. Si nota signos de dolor o problemas continuos, es aconsejable hablar con su pediatra para descartar cualquier causa subyacente.
A menudo sugiero crear una rutina relajante para la hora de dormir que comience a una hora fija cada noche. Rituales sencillos como leer un cuento corto, bajar las luces y poner música suave pueden indicarle a su hijo que es hora de calmarse. Asegurarse de que el tiempo frente a las pantallas termine al menos una hora antes de acostarse puede ser de gran ayuda, al igual que mantener los juguetes y el ruido al mínimo en el área donde duerme.
Recuerde que cada niño es único, y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. Si ha intentado hacer algunos ajustes y su hijo pequeño todavía no duerme bien, no dude en consultar a su pediatra. Estoy aquí para apoyarle y quiero que sepa que, al hacer estas preguntas y buscar ayuda, ya está haciendo un gran trabajo cuidando a su pequeño.
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